CRÍTICA: Matrioskas, arte de color violeta

Foto elegida

 

¿Qué es la verdad? ¿Por qué hay verdades que no somos capaces de percibir? Este concepto eterno que parece estar de moda en un mundo gobernado por la economía, me hace reflexionar en medio de las risas, sentada entre el público, es fascinante cuantas verdades se pueden expresar en tono de comedia. “Matrioskas” es la nueva producción de la compañía Primas de Riesgo que llegó a los Teatros Luchana el pasado 26 de abril. Sobre un guión de Ernesto Caballero y bajo la dirección de Karina Garantivá, cinco actrices llevan a cabo la construcción de una obra que parte de la tragedia de Hamlet, tomando como referencia una escena en que los comediantes hacen una representación ante el Rey Claudio siguiendo las indicaciones del propio Hamlet. En este marco se plantea una situación que se viste de color violeta porque lo trágico y lo cómico conviven en un espacio real e inventado.

Una compañía compuesta por cinco mujeres acude a una mansión en Puerto Banús,  ha sido contratada por unos magnates rusos a través de una página web para hacer una actuación siguiendo unas indicaciones que ellos mismos les han requerido: “Canciones ligeras, el calorcito que viene del Sur, baile sexy”. Sin embargo su estancia en la mansión estará llena de inconvenientes desde el momento de su llegada. Mila, Azu, Bego, Caro y Leti, cinco actitudes frente a cada situación y un deseo común de profesionalidad y de cobro del cachet guiarán el argumento a través de las escenas, sumiéndose poco a poco en medio del caos sin ni siquiera salir de la sala en la que deben prepararse.

Estas protagonistas, que han dedicado su vida a las artes escénicas sin conseguir “triunfar”, buscan trabajar a pesar de las contrariedades persistentes que rodean a los actores y en especial a las actrices. Sin embargo estas actrices no persiguen la fama ni el “éxito”, tan solo luchan por trabajar en su profesión de una manera digna.

Las actrices Nanda Abella, Sandra Gade, Noemí Martínez, Cristina Palomo y Maribel Vitar  forman un equipo liderado por Karina Garantivá, ellas encarnan a las protagonistas y han puesto en pie este espectáculo auto producido. Sus interpretaciones van desde la caricatura hasta la verdad, llegando a romper incluso la cuarta pared porque, al fin y al cabo, la realidad de las protagonistas es la realidad de muchas actrices en España.

El montaje humilde potencia la calidad del trabajo, porque el objetivo está claro: es arte por y para el arte. En cada función ningún detalle puede pasar inadvertido porque en el tono de humor y la ironía reside la esencia de la obra. El trabajo sensorial y textual de las actrices provoca la recreación del espacio y del ambiente acompañada por un sencillo juego de luces y sin apenas elementos que apoyen la labor interpretativa.

La verdad es que las mujeres no están igualmente valoradas en las artes escénicas, la verdad es que las actrices tienen menos posibilidades laborales, que cobran menos y que muchas de estas realidades no se ven a simple vista. En el Laboratorio Primas de Riesgo, actrices y actores profesionales se reúnen para investigar y seguir actuando a pesar de la ausencia de trabajo, así surgen proyectos como “Runners” o “Matrioskas”, obras llenas de contenido, de interpretaciones llenas de verdad y de verdades.

“Matrioskas” permanecerá en los Teatros Luchana hasta el 28 de julio, todos los viernes a las 20h.

 

 

 

Datos de interés:

  • Lugar: Teatros Luchana
  • Fechas: Hasta el 28 de Julio
  • Horarios: Viernes 20h
  • Venta de entradas: Web y taquilla