EVENTO: “La ilusión del cine” en la Fundación Wellington
El cine es un reflejo permanente de la evolución social, política cultural e histórica que, inevitablemente, forma parte inexorable de nuestra memoria colectiva. Así, la Fundación Wellington ha organizado el coloquio ‘La Ilusión del Cine’, contando con las grandes figuras del cine español, como el autor literario, director guionista y productor D. José Luis Garci; Dña. Victoria Vera, una de las actrices más notables de la transición española; y D. Eduardo Torres Dulce, profesor de Derecho Penal y crítico cinematográfico, siendo co-guionista con Garci en 2012 de la película Homes & Watson: Madrid Days.
Al acto celebrado el pasado 26 de Enero asistieron diversas personalidades del mundo del cine, el teatro, la cultura y la política, que tras las palabras de bienvenida de la Secretaria del Patronato de la Fundación Wellington, Dña. Maria Pilar Moratiel, han participado de un interesante análisis moderado por la periodista Dña. Ana Samboal, sobre el pasado y el presente del cine. Un recorrido al que debemos prestar atención, especialmente en los tiempos que corren:
-“El cine es museo, pues son creaciones de permanencia infinita”. Según José Luis Garci, el cine es creación del hombre, y por tanto, arte. Especialmente el cine clásico de los años XX. Y es que el cine es como la vida misma: -“Somos testigos de la realidad y la vida a través de él. Hay amor, desamor, muerte, vida”. Esto nos lleva en muchas ocasiones a la nostalgia. Garci advierte que el siglo de oro cinematográfico no volverá, no obstante, permanecerá siempre, como una fuente inagotable de talento, creatividad y realismo. A continuación y como testigo de la transición desde la interpretación cinematográfica, Victoria Vera es rotunda: “Mientras hay cine hay vida”. En su opinión, el cine ha sabido coexistir hasta la actualidad con el resto de disciplinas. La industria comenzó en Estados Unidos, y posteriormente en Europa. Por primera vez, en el siglo XIX aparecía un nuevo invento capaz de cambiar y revolucionar el panorama social y cultural. Hoy es capaz de captar la visión, la ilusión y la realidad: -“Desde los ilusionistas y los acróbatas de finales del XIX, a los revolucionarios de la “nouvelle vague”, hasta nuestros días, recogiendo en el tiempo y el espacio la historia, que es inherente a la vida”
Por último, Eduardo Torres Dulce, aludió a una de las mejores definiciones del cine, acuñada por Garci: -“El cine es una vida de repuesto”, y al mismo tiempo un oasis en el mundo que nos rodea. Según Torres Dulce, el origen del cine se encuentra en la ‘Alegoría de la Caverna’ de Platón, esa cueva cuyos habitantes ven plasmada la realidad exterior a través de las sombras, la interpretación, la imaginación y los sueños. El ser humano, desde su hábitat en tribu, ha necesitado de las historias, rodeándose en una sala, escuchándose los unos a los otros atentamente. Algo poco habitual. De algún modo, el cine es similar, pues nos reunimos en esa ‘caverna’ para ser testigos de esa historia en libertad y colectividad. Esto posibilita el construir nuestro futuro y por tanto seguir adelante: -“Como decía Oscar Wild, el arte imita a la vida y la vida imita el arte”. Para este ex Fiscal General del Estado, co-guionista y crítico de arte, el cine es ilusión, evasión y diversión, casi incluso en paralelo con los tres fines inexorables del periodismo: informar, formar y entretener. Cuando esto se rompe, ocurre como en la política y se crea un vacío. Sin embargo el cine es inclasificable, pues una vez el creador expone su obra, pasa a propiedad de las gentes, a través de héroes, personajes misteriosos, momentos mágicos que nos permiten imaginar, soñar. El cine es fundamental en nuestras vidas, y así lleva siendo durante 150 años.
El broche final lo pusieron los propios asistentes con sus preguntas y durante el cóctel, en una noche donde la ilusión congregó a más de trescientos asistentes.