RESTAURANTE: ‘El Ancla del Lago’: Un Rincón Gastronómico en la Casa de Campo
Ubicado en uno de los entornos más privilegiados de Madrid, frente al majestuoso lago de la Casa de Campo, el Restaurante ‘El Ancla del Lago‘ se presenta como una joya gastronómica que combina la tradición culinaria española con un paisaje natural incomparable. Este rincón, alejado del bullicio de la ciudad, ofrece a sus comensales una experiencia que va más allá de la comida, regalando momentos de serenidad mientras se disfrutan las vistas espectaculares del lago.
En nuestra reciente visita, tuvimos el placer de degustar algunas de las especialidades que hacen de ‘El Ancla del Lago’ un referente en la zona. Como entrante, optamos por los pimientos asados con ventresca y cebolla morada, un plato que destaca por su frescura y equilibrio de sabores. Las texturas suaves de la ventresca se complementan perfectamente con la dulzura de los pimientos asados y el toque crujiente de la cebolla morada, creando una entrada que despierta el apetito y anticipa una comida memorable.
Para continuar, no pudimos resistirnos a probar las croquetas de jamón, que sin duda son las mejores que hemos tenido el placer de disfrutar. Crujientes por fuera y cremosas por dentro, estas croquetas son un verdadero homenaje a la cocina tradicional española, donde cada bocado ofrece una explosión de sabor que te transporta a la auténtica casa de abuela.
El plato principal fue, como no podía ser de otra manera, el arroz con bogavante para dos personas. Este plato, estrella del restaurante, cumplió con creces nuestras expectativas. El arroz, perfectamente cocido y lleno de matices, se entrelaza con la carne jugosa del bogavante, ofreciendo una sinfonía de sabores marinos que se disfruta lentamente, permitiendo apreciar la calidad excepcional del producto y la maestría con la que está elaborado.
Para culminar nuestra experiencia, no podíamos dejar de probar los postres, y la elección fue todo un acierto. La tarta de queso se llevó el primer aplauso, con una textura cremosa y un sabor delicado que dejaba en el paladar una sensación suave y agradable. Este clásico postre fue la manera perfecta de cerrar una comida espectacular.
Sin embargo, la verdadera estrella fue sin duda las filloas rellenas de crema. Estas delicias, que son ya famosas en el restaurante, nos conquistaron con su masa fina y suculenta, rellena de una crema suave y dulce que se deshace en la boca. Un postre que refleja la dedicación y el cariño con el que se preparan cada uno de los platos en ‘El Ancla del Lago’.
Además de su excelente oferta gastronómica, ‘El Ancla del Lago’ se distingue por su ubicación inmejorable. Las terrazas, con vistas directas al lago, ofrecen un ambiente relajado y fresco, especialmente en los días cálidos de verano. El restaurante abre de martes a domingo, desde las 9:00 hasta la medianoche, permitiendo a los comensales disfrutar de una comida o cena en un entorno natural sin igual en pleno Madrid.
En definitiva, ‘El Ancla del Lago’ no es solo un lugar donde comer, sino un destino donde vivir una experiencia culinaria completa, rodeado de naturaleza y con el inconfundible sabor de la cocina castiza madrileña. Sin duda, un lugar al que volveremos.