CINE: Elphaba y Glinda iluminan Oz, ‘Wicked’ es puro espectáculo
El próximo 22 de noviembre, Wicked: Part One llega a los cines para deslumbrar con la primera mitad de una adaptación cinematográfica épica del musical teatral que ha cautivado al mundo durante dos décadas. Bajo la dirección de Jon M. Chu, la película traslada la mágica tierra de Oz a la gran pantalla con una visión profundamente emotiva y visualmente impactante.
La trama, situada antes de los eventos de El Mago de Oz, sigue los orígenes de Elphaba y Glinda, dos jóvenes cuya relación desafía las expectativas y los prejuicios de un mundo dividido. Elphaba, marcada por su piel verde, busca aceptación en la elitista Universidad de Shiz, mientras Glinda, una joven privilegiada, lucha por encontrar un propósito más allá de las apariencias. Su amistad, compleja y transformadora, será el núcleo de una historia que explora los límites del poder, la identidad y la ambición.
Aunque no es necesario haber visto El Mago de Oz para disfrutar Wicked, conocer el clásico de 1939 puede enriquecer la experiencia, ayudando a identificar guiños y conexiones que profundizan la narrativa.
Cynthia Erivo y Ariana Grande convierten cada escena de Wicked: Part One en un espectáculo que parece transportarte directamente a un teatro. Desde el primer momento, ambas actrices demuestran un dominio total de sus personajes y de la atmósfera del musical, ofreciendo interpretaciones que invitan a aplaudir en cada canción y escena.
Erivo, en el papel de Elphaba, irradia una intensidad que equilibra vulnerabilidad y fuerza. Su interpretación de Defying Gravity es el tipo de momento que eriza la piel, logrando que la transición de su personaje de una joven incomprendida a una figura poderosa sea a la vez desgarradora e inspiradora. Cada nota y expresión suya parecen dirigidas directamente al alma del espectador, recordándonos por qué es considerada una de las mejores intérpretes de su generación.
Por otro lado, Ariana Grande como Glinda aporta una frescura y ternura que sorprenden. Sus momentos de humor en canciones como Popular se combinan con una profundidad emocional que nunca la aleja del público. A medida que Glinda evoluciona, Grande capta con maestría el contraste entre la ligereza de la joven soñadora y las complejidades de una mujer enfrentándose a las consecuencias de sus elecciones.
Juntas, Erivo y Grande consiguen una química que sustenta la película y mantiene al público cautivado durante las dos horas y 40 minutos de duración. A pesar de su extensión, el tiempo vuela mientras estas dos artistas entregan cada palabra, cada mirada y cada nota con tanta pasión que hacen que el mundo de Oz cobre vida de una manera irrepetible.
El elenco lo completan estrellas como Michelle Yeoh, quien da vida a una imponente Madame Morrible; Jonathan Bailey, que aporta encanto a Fiyero; y Jeff Goldblum, quien reinventa al Mago de Oz con su carismática presencia.
El diseño de producción convierte a Oz en un espectáculo cinematográfico. Desde los vibrantes campos de tulipanes en la Tierra de los Munchkins hasta la grandiosidad art déco de la Ciudad Esmeralda, cada detalle refleja un mundo lleno de contrastes. La fotografía, a cargo de Alice Brooks, juega con la dualidad de luz y oscuridad para subrayar el viaje emocional de los personajes.
Musicalmente, Wicked: Part One mantiene las queridas composiciones de Stephen Schwartz, con nuevas orquestaciones que aprovechan el formato cinematográfico. Las interpretaciones en vivo durante el rodaje aportan autenticidad, especialmente en momentos como Popular y For Good, que resaltan el crecimiento emocional de las protagonistas.
Datos curiosos que hacen mágica la producción
- El maquillaje verde de Elphaba requirió más de 60 pruebas para encontrar el tono perfecto que funcionara bajo diferentes condiciones de luz.
- Los trajes de Glinda y Elphaba se diseñaron para reflejar su evolución, desde la delicadeza pastel de Glinda hasta los oscuros matices de Elphaba, incorporando detalles como la espiral de Fibonacci para simbolizar cambio y crecimiento.
- La escena de Defying Gravity se filmó combinando efectos visuales avanzados y un modelo físico de la Ciudad Esmeralda, creando una experiencia de vuelo única en pantalla.
Wicked: Part One no solo honra el legado del musical, sino que lo expande con una visión fresca y emocionante. Con actuaciones cautivadoras, un diseño deslumbrante y una narrativa que resuena en nuestra era, esta película es más que un espectáculo; es un viaje emocional que redefine lo que significa ser incomprendido y luchar por un lugar en el mundo. Para fans y nuevos espectadores, Wicked promete ser un evento inolvidable.