TEATRO: «Viernes» Una Cena que Desarma el Alma y Despierta la Risa
En la maravillosa Sala Lola Membrives del Teatro Lara, «Viernes» se presenta como una obra que transforma una simple cena en una montaña rusa emocional, una radiografía hilarante y cruda de las relaciones humanas. Con texto de Javi Ruiz y dirección de Naím Thomas, esta comedia consigue que el público, como el quinto invitado de la noche, se sienta cómplice y testigo de una velada que promete risas, tensión y profundas reflexiones.
Si algo brilla en «Viernes» son las interpretaciones de Patricia Peñalver y Lucía Ramos, que encarnan a Elsa y Lucía, respectivamente. Peñalver da vida a una Elsa compleja, cargada de emociones contenidas y anhelos profundos. Su capacidad para transmitir vulnerabilidad y fuerza en el mismo suspiro la convierte en el corazón de la obra. Cada mirada y cada pausa suya parecen desentrañar capas ocultas del personaje, conectando al espectador con sus miedos y deseos.
Por su parte, Lucía Ramos deslumbra con una energía arrolladora. Su Lucía es carismática, desinhibida y caótica, el contrapunto perfecto al resto de los personajes. Ramos equilibra con maestría el humor y la intensidad, creando un personaje que no solo entretiene, sino que también hace pensar en nuestras propias necesidades de evasión y conexión.
Aunque las actuaciones masculinas pueden quedar eclipsadas por las interpretaciones femeninas, Gonzalo Trujillo y Javi Ruiz aportan un contrapunto esencial. Trujillo, en el papel del dramaturgo Thomas, combina un aire melancólico con momentos de brillantez cómica, mientras que Javi Ruiz encarna a un Alberto frustrado y resignado con una autenticidad que resulta entrañable. Juntos, ambos personajes sostienen la trama y nos recuerdan que detrás de las máscaras de control o indiferencia se esconden miedos tan humanos como los de sus compañeras.
«Viernes» es mucho más que un espectáculo de enredos. Lo que empieza como una reunión cotidiana, entre risas y vino, se convierte en una disección de las inseguridades, los secretos y las carencias que todos llevamos dentro. En esta cena, la comedia y el drama se mezclan de manera magistral, y el público se encuentra riendo mientras reflexiona sobre las miserias de los personajes… y quizás también sobre las propias.
La dirección de Naím Thomas apuesta por la cercanía, permitiendo que los actores se luzcan y los personajes hablen directamente al público. La sencillez del montaje, lejos de restar, suma al crear un ambiente íntimo, como si realmente estuviéramos sentados a la mesa con Elsa, Lucía, Thomas y Alberto.
«Viernes» es un espectáculo que cumple con creces su cometido: entretener, emocionar y generar conversación. Con actuaciones memorables, especialmente las de Patricia Peñalver y Lucía Ramos, y un guion que equilibra risa y reflexión, esta obra invita a los espectadores a reírse de sí mismos y de las pequeñas tragedias de la vida.
Si tienes la oportunidad de asistir, no dudes en convertirte en el quinto invitado de esta cena inolvidable. Entre risas, copas y emociones a flor de piel, «Viernes» es una obra que te dejará pensando mucho después de que el telón caiga.