CRÍTICA: Fragmentos de teatro I, minimalismo en un rincón de Madrid
“A y B, la línea recta, el espacio vacío”. Samuel Beckett.
Por Laura Auzmendi
En un escenario completamente oscuro, con una música intrigante aparece, de pronto, una linterna, así comienza Fragmentos de teatro I. Después los focos iluminan un espacio pequeño y completamente vacío. Aintzane Garreta ha adaptado y dirigido esta versión de la obra de Samuel Beckett que se estrenó en 1979. El reparto esta compuesto por ella misma junto a Joxean Orbegozo. El estilo personal de Beckett que se pone con esta obra sobre el escenario se escapa a veces del entendimiento y se aleja del teatro más cotidiano.
Una mujer en silla de ruedas y un hombre ciego se encuentran en una esquina abandonada de la calle, lugar donde ocurre toda la acción, e inician así una relación. Ella comienza a llamarle Billy porque era el nombre de su hijo y en un momento dado propone que ambos se unan de tal forma que el sea sus piernas y ella sea los ojos de el. Es una a obra llena de impulsos y conductas guiadas por cualidades muy humanas. A y B son los mencionados personajes que, con vidas diferentes, se encuentran en la misma situación de soledad.
En esta sucesión de escenas que van desplazándose por todo el escenario los dos actores realizan un buen trabajo de escucha y ritmo. Ambos viajan en una montaña rusa de sentimientos. Aintzane Garreta destaca por su buena interpretación y trabajo corporal en un personaje con una marcada inocencia que transita constantemente de una emoción a otra. Joxean Orbegozo mantiene en todo momento el clima misterioso y oscuro que requiere el texto.
Los dos a actores se enfrentan cara a cara con un público reducido y prácticamente a pie de escenario. La dificultad se hace evidente por la austeridad de los medios y el espacio reducido en que se produce el acto teatral, un acto emocionante y absolutamente íntimo entre el público y los intérpretes. La música original que acompaña a esta atmósfera es obra de David Pher y el propio Joxean Orbegozo.
Fragmentos de teatro I posee el carácter abierto de las obras de Beckett y supone perderse dentro de una complejidad muy atractiva para la libre interpretación de los espectadores. Se puede disfrutar todos los viernes de octubre y noviembre a las 21:00 en el Teatro del Águila.