LIBROS: «Rusia contra el mundo» de Marc Marginedas
En un mundo saturado de ruido informativo, donde los titulares se suceden a la velocidad de un disparo y las noticias pierden su profundidad en cuestión de horas, Rusia contra el mundo emerge como un documento vital. Marc Marginedas, curtido en los frentes más crudos de la guerra y la represión, no escribe desde la comodidad del despacho ni desde la fría recopilación de informes: escribe desde la memoria del testigo, desde el filo de la experiencia personal y la investigación rigurosa.
Este libro no solo desnuda la arquitectura de un Estado que ha hecho del crimen y el terror su política de Estado. Es también un retrato inquietante del modo en que Rusia, bajo el puño de hierro de Vladímir Putin, ha resurgido de sus cenizas soviéticas no como un socio en el concierto de las naciones, sino como un depredador que socava democracias, financia conflictos y envenena la disidencia dentro y fuera de sus fronteras.
Marc Marginedas articula su relato con un pulso narrativo impecable. Desde los atentados de falsa bandera que arrasaron edificios en Moscú a finales de los noventa, hasta los laboratorios invisibles de desinformación que contaminan las redes sociales occidentales, cada episodio del libro traza un mapa siniestro de un poder que no reconoce límites éticos. Las guerras de Chechenia, Siria y Ucrania no son, en su mirada, episodios aislados, sino capítulos de una misma estrategia de devastación sistemática.
Especialmente conmovedor resulta el enfoque humano que atraviesa cada página: los testimonios de víctimas, las tragedias silenciosas, las denuncias de periodistas silenciados, la maquinaria invisible que destruye vidas en nombre de una geopolítica cínica y despiadada. Marginedas, que sufrió él mismo el horror del secuestro en Siria, habla no solo con conocimiento, sino también con el coraje de quien ha pagado el precio de buscar la verdad.
Rusia contra el mundo revela una Rusia que ya no necesita tanques para expandir su influencia: le basta con la corrupción, la propaganda, la manipulación de las élites políticas y los atentados encubiertos. Un Estado que ha hecho de la mafia una extensión del poder oficial, y de la violencia una herramienta de política exterior.
Pero el libro es mucho más que una crónica de horrores. Es también un acto de memoria y una advertencia lúcida: la amenaza no es un problema lejano ni ajeno. Es una red que alcanza a España, a Europa entera, como Marginedas expone al narrar las infiltraciones de propaganda rusa, los intentos de compra de periodistas, los juegos de influencia sobre partidos políticos y embajadas.
Con una prosa sobria, precisa y profundamente comprometida, el autor logra algo muy difícil: construir un testimonio que no busca el escándalo, sino la comprensión profunda. Cada capítulo, cada dato, cada anécdota está documentada con la seriedad de quien sabe que no solo está informando: está alertando.
Rusia contra el mundo no deja al lector indiferente. Obliga a abrir los ojos, a cuestionar las certezas cómodas, a asumir que los nuevos imperios no se construyen ya con muros y ejércitos visibles, sino con redes de corrupción, miedo e impunidad.
En tiempos en que la verdad se vuelve un campo de batalla, la voz de Marc Marginedas resuena como un llamado a resistir la anestesia colectiva. A no acostumbrarnos. A no rendirnos.
Porque comprender los mecanismos del terror moderno es, quizá, el primer paso para combatirlo.
Un libro esencial. Un acto de valentía. Un periodismo que honra a quienes aún creen en la palabra como un arma de justicia.