LIBROS: El mapa definitivo del whisky en el siglo XXI

En un panorama editorial saturado de guías rápidas y textos divulgativos sobre destilados, Atlas mundial del whisky se alza como una obra de referencia que trasciende los convencionalismos del género. Firmado por Dave Broom, una de las voces más respetadas en el mundo de los espirituosos, este volumen publicado por Blume ofrece un recorrido que combina la precisión enciclopédica con una mirada profundamente humana hacia el universo del whisky.

Lo primero que llama la atención es su ambición cartográfica. El libro no solo localiza geográficamente más de quinientas destilerías, sino que traza un auténtico mapa de culturas, tradiciones y evoluciones técnicas. Los 34 mapas actualizados —algunos completamente inéditos— sirven tanto para situar al lector como para mostrar el pulso de una industria que nunca ha sido tan global ni tan diversa.

La estructura del volumen es clara y generosa: desde una introducción concisa a los fundamentos de producción hasta capítulos regionales que recorren los grandes focos históricos —Escocia, Irlanda, Estados Unidos— y los escenarios emergentes que hoy reconfiguran el sabor del whisky contemporáneo: México, Escandinavia, el Asia oriental o Oceanía. Broom se adentra en cada territorio con la mezcla justa de rigor y curiosidad, consciente de que el whisky del siglo XXI ya no puede explicarse únicamente desde sus raíces tradicionales.

Uno de los pilares del libro es su sistema de nueve familias aromáticas, una herramienta que convierte la lectura en una experiencia casi sensorial. Las más de 480 notas de cata están escritas con una prosa cristalina, precisa pero accesible, que permite tanto a entusiastas veteranos como a principiantes situar cada expresión en un paisaje de sabores y técnicas. Encontramos single malts, bourbons, ryes, single pot still, whiskies de cereales locales e incluso propuestas que exploran terroirs inesperados, lo que refleja la explosión creativa que vive el sector.

Broom escribe con la autoridad de alguien que lleva décadas viajando, catando y dialogando con destiladores de todo el mundo, pero también con la cercanía de un narrador que entiende el whisky como cultura, como territorio y como rito compartido. Su trayectoria —premiada en múltiples ocasiones y ampliamente reconocida por la crítica especializada— se nota tanto en la claridad de sus explicaciones como en su capacidad para contextualizar cada destilería dentro de una historia mayor.

La visita del autor a España, prevista para noviembre en el marco de Whisky Live Madrid, añade un atractivo especial a esta publicación. No es frecuente tener tan cerca a una figura que ha influido en la forma en que se escribe, se enseña y se comprende el whisky a escala internacional.

En definitiva, Atlas mundial del whisky no es solo una guía: es un compendio cultural, un instrumento de aprendizaje y una celebración del espíritu que une a maestros destiladores, aficionados y curiosos de todos los rincones del planeta. Para quienes buscan una obra completa, actualizada y bellamente ilustrada, este atlas se convertirá en un compañero imprescindible en la estantería… y en la copa.