LIBROS: “Las mujeres fotógrafas son peligrosas”: un retrato que rompe el silencio histórico

En un mundo donde la historia de la fotografía ha sido mayoritariamente escrita por y sobre hombres, Las mujeres fotógrafas son peligrosas emerge como un relato audaz que busca reivindicar la presencia y el talento femenino en este arte. Publicado por la editorial Blume, el libro combina un despliegue visual notable con textos incisivos que examinan el papel de las mujeres en la fotografía, no solo como artistas sino como agentes que desafían las estructuras sociales y culturales que han limitado su reconocimiento.
Las autoras, Laure Adler y Clara Bouveresse, construyen un recorrido que va más allá de las biografías tradicionales. A través de figuras emblemáticas como Dora Maar, Vivian Maier y Graciela Iturbide, así como de fotógrafas menos conocidas pero igualmente valiosas, el libro investiga cómo el género ha condicionado la visibilidad, las oportunidades y la interpretación de sus obras. Cada capítulo se convierte en un espacio para cuestionar las normas históricas que relegaron a las mujeres a un segundo plano y, al mismo tiempo, para celebrar su capacidad de innovación, riesgo y resistencia.
El texto logra equilibrar el análisis crítico con la sensibilidad artística. Los relatos de vida se entrelazan con la historia de la fotografía desde una perspectiva feminista, mostrando cómo estas mujeres han transformado la mirada dominante sobre el mundo mediante imágenes que no solo documentan, sino que también cuestionan y provocan. La obra no rehúye abordar las barreras que enfrentaron, desde las limitaciones sociales hasta la incomprensión del mercado artístico, y cómo esas adversidades, lejos de silenciarlas, alimentaron una producción fotográfica de notable fuerza y originalidad.
Con un índice que se inicia en “Abrir la infinitud del mundo” y recorre desde pioneras como Anna Atkins hasta artistas contemporáneas como Maya Inès Touam, Las mujeres fotógrafas son peligrosas se convierte en una lectura imprescindible para quienes deseen comprender la fotografía más allá de su técnica, explorando la dimensión social, política y de género que la atraviesa. La obra de Adler y Bouveresse es, en suma, una invitación a mirar la historia de la fotografía con ojos críticos y atentos, celebrando la creatividad femenina que desafió la invisibilidad y dejó una huella indeleble en el arte visual.