CRÍTICA: Y tú, ¿qué haces «Mientras tanto»?
Autoría y dramaturgia: María Inés González, Miguel Ángel Cárcano.Intérpretes: Rocío Vidal, Marta Romero y Marta Naharro. Dirección: Miguel Ángel Cárcarno. Vestuario: Nela Marrero, Kinda Kinks. Fotografía: Raquel Benito. Diseño Gráfico: Deo Studio. Producción: Rocío Vidal. Comunicación: Lemon Press.
Del 23 de junio al 11 de agosto, todos los jueves a las 20:15h, en el TEATRO LARA (Corredera Baja de San Pablo, 15. 28004 MADRID).
Saladina Jota
«MIENTRAS TANTO» es la historia de tres mujeres durante dos años. Tres mujeres muy diferentes: Carlota, –Rocío Vidal-, exigente, rígida y ambiciosa expera el éxito social y profesional; Emilia, –Marta Romero-, una vividora, alocada y auténtica, que huye del aburrimiento mientras espera que su vida sea una aventura constante; y Ana, –Marta Naharro-, apocada e insegura, que espera el empujón de algo o alguien para intentar cambiar su vida y cumplir el sueño que no es capaz de perseguir o que no sabe qué es. Y dos años en los que se van conociendo a medida que sus vidas cambian, con o sin su consentimiento. Dos años en los que charlas plagadas de confidencias y reflexiones, dudas y reproches, envidias soterradas y esperanzas ocultas, complicidades y desencuentros, distanciamientos y acercamientos, entre otras cosas, se suceden mientras estas tres mujeres sueñan, se beben o diseñan su vida, esperando que sus deseos se cumplan. Pero «La vida es aquello que pasa mientras planeamos un futuro mejor» (John Lennon), y la vida es experta en sorpresas y sustos, que para bien o para mal trazan una realidad muy alejada de lo deseado, incluso cuando se cumplen los sueños.
«MIENTRAS TANTO» abre una ventana a un lugar -la sala de espera- que es a la vez un espacio público y una metáfora de la vida. Esperar, como en el cine, es lo que más tiempo ocupa a un ser humano. Esperar es acción y es una actitud íntimamente relacionada con el rol elegido, consciente o inconscientemente, en el teatro de la vida. Puedes esperar a que alguien o algo dirija tu vida o dirigirla tú mismo, eso es así, pero en ambas opciones lo aleatorio, el azar, la suerte, el destino, karma o como quieras llamarlo entrará irremisiblemente en juego. La vida está ahí para recordarte que la dirección no está en tus manos. Que eres un simple actor y que debes aplicarte en hacer bien tu papel mientras esperas lo que ella tiene destinado para ti. Y «MIENTRAS TANTO», puedes ir construyendo, sufriendo y disfrutando, sin apenas darte cuenta, de una de las cosas más valiosas que puedas llegar a poseer: LA AMISTAD. ¿o, no?
María Inés González y Miguel Ángel Cárcarno se la juegan escribiendo un texto que es en realidad un ejercicio de funambulismo teatral digno de respeto. «MIENTRAS TANTO» pone en escena cinco momentos cotidianos en cinco salas de espera -centro estético, médico o sala de tatuajes- perfectamente reconocibles. Cinco charlas entre amigas que son las vertebras de esta comedia cercana, amable y reconfortante en la que parece que no pasa nada, porque todo ha pasado antes del encuentro. El espectador, como en una sala de espera, asiste a las reacciones, reflexiones y conclusiones de las tres mujeres ante las noticias compartidas en esas cinco salas de espera. Salas de espera en las que cualquiera se convierte en protagonista o espectador inesperado. Y entre sala de espera y sala de espera tres monólogos en el límite estre la confesión, la reflexión y el flujo de pensamiento. Tres monólogos que son en realidad tres semidesnudos a solas con el público. Parece, pues, que todos los acontecimientos importantes en las vidas de estas mujeres suceden antes y después de la espera -¿o, no?-. Cabría preguntarse qué se juegan estos personajes y cuál es la acción dramática que sostiene la obra. Y, por lo menos, hay una respuesta: se juegan la amistad. Un juego al que todos jugamos todos los días y en el que el fracaso y el éxito es mucho más trascendente de lo que a priori valoramos. Sólo el tiempo, inexorable, y la vida, traviesa e impredecible, nos enseñan su verdadera importancia. Eso si somos listos y escuchamos, sino la soledad será la única amiga posible. «MIETRAS TANTO» es una comedia que tiene sus tintes amargos y momentos en que parece que la cosa puede llegar a mayores, pero no, porque la amistad verdadera nunca se rompe, ¿o, no?.
Como en otras obras escritas mano a mano por esta pareja de autores -» Cuatro estaciones y un día», «Peces» o, «Entreactos»- el sexo, relación social o procedencia de los pesonajes, no importa. Lo único importante son las pequeñas historias cotidianas de los antihéroes y antiheroínas que las protagonizan; su humanidad de andar por casa y sus sueños dentro de la norma, ¿o. No? Y todo salpimentado con una pizca de humor. Una obra que se cocina con algo que es como el pollo que comemos a diario y que sólo valoramos cuando pasamos hambre: la compañía de los amigos.
Rocío Vidal, Marta Romero y Marta Naharro hacen un gran trabajo. «MIENTRAS TANTO» es un texto, arriesgado en su concepción, y que sitúa a las actrices en una delgada línea roja por la que deben moverse sin caer en la monotonía. Actoralmente es un texto que lo pone muy difícil y estas tres señoras no sólo atrapan la atención del público de principio a fin, sino que al terminar la función no hay nadie en el patio de butacas al que no le hayan pintado una sonrisa en el rostro.
Con una sencilla y efectiva puesta en escena y tres actrices para aplaudir, bajo la batuta discreta de Miguel Ángel Cárcano, «MIENTRAS TANTO» va por su 3ª Temporada de éxito. Seguro que toda la banda soñaba con ello, pero ¿se lo esperaban?, y ¿qué han hecho mientras estaban esperando? SI QUIERES SABERLO, NO TE LA PIERDAS, LA RESPUESTA ES LA FUNCIÓN.