SEXO: Los juguetes sexuales mejoran la calidad de vida de las personas discapacitadas

  • Según un estudio realizado por LELO, un 57% de los españoles desconoce que los juguetes sexuales ayudan a aliviar el dolor crónico, la tensión u otros síntomas entre personas con ciertas discapacidades.


  • Un 50% de personas discapacitadas cree que la sociedad piensa que son asexuales únicamente por su discapacidad.


  • Los españoles piensan que las personas discapacitadas están menos interesadas en el sexo (46%), sin embargo, para estas es muy importante que la sociedad comience a cambiar su mentalidad sobre este tema, y entender e interiorizar que también pueden disfrutar del sexo como una persona sin discapacidad.

 

Cada día es más habitual hablar de bienestar sexual, principalmente cuando entendemos que es algo que forma parte de nuestra vida y permite conocernos a nosotros mismos. Desafortunadamente, no sucede lo mismo cuando hablamos de sexo y personas con discapacidad, una temática difícil de abordar para la mayor parte de la sociedad.

Por este motivo, LELO, la reconocida marca de bienestar sexual y juguetería erótica, ha realizado un estudio* entre más de 1.000 españoles -la mitad de ellos con discapacidad- para desmitificar algunos aspectos relacionados con esta temática y dar voz a las personas discapacitadas. 

De él se desprende que 2 de cada 10 discapacitados piensan que no tienen las mismas oportunidades y opciones a su alcance para vivir la vida como una persona que no tiene discapacidad. Y aquí es donde radica el problema principal. Nadie debería sentirse inferior o discriminado. 

En la mayoría de los casos, el desconocimiento es el principal enemigo de los españoles, y en el ámbito sexual más aún. Casi la mitad de las personas discapacitadas (47%) afirma que la sociedad suele identificar erróneamente su sexualidad y además, se tiende a pensar que son asexuales, es decir, que no tienen deseos ni atracción sexual únicamente por su discapacidad (50%).

Del mismo modo, la mitad de los españoles desconoce que los juguetes sexuales ayudan a aliviar el dolor crónico, la tensión u otros síntomas en personas con ciertas discapacidades. Según Luka Matutinovic, CMO de LELO, “nadie o casi nadie sabe que los juguetes sexuales son poderosas herramientas para mejorar la calidad de vida de personas con algunas discapacidades. Es por ello que desde LELO nos vemos obligados a dar voz a este tema que aún pasa desapercibido”.

 

Vivir la sexualidad sin sentirse juzgado

Los prejuicios, creencias erróneas o sentimientos de culpa deberían ser el objeto de toda educación sexual. Así lo afirma un 56% de los encuestados que padece alguna discapacidad, asegurando que su vida sexual o sentimental se ha visto afectada negativamente tras sentirse juzgados por la sociedad. De hecho, muchos de ellos afirman que en algún momento  se han sentido discriminados socialmente (38%), y los  mayores obstáculos a los que se tienen que enfrentar son la ansiedad emocional (57%) y la accesibilidad (40%).

Por este motivo, para un 72% de los discapacitados encuestados es muy importante que la sociedad comience a cambiar su mentalidad acerca de la sexualidad de las personas discapacitadas, y entender e interiorizar que también pueden disfrutar del sexo como una persona que no tiene discapacidad. 

La mayoría de los participantes de la encuesta – tanto discapacitados como no- creen que su entorno está adaptado y ha evolucionado significativamente (72%), aún así, todavía queda mucho camino por recorrer. 

 

 

Falsas creencias sobre sexualidad

Los mitos nos llevan a silenciar, invisibilizar y dar poca importancia a la educación sexual. Sin embargo, esta es la mejor herramienta para prevenir, apoyar y reducir barreras y prejuicios frente a la sexualidad de una persona con discapacidad. 

La sociedad tiende a visualizar a estas personas como asexuales, infantilizándolas e impidiéndolas evolucionar en todos sus ámbitos. Tanto es así que, el 46% de los españoles considera que las personas discapacitadas están menos interesadas en el sexo. Pensamiento que, obviamente es erróneo pero entendible, si tenemos en cuenta que 7 de cada 10 españoles no son conscientes de las sensibilidades a las que se enfrentan a diario las personas con discapacidad.

“La mayoría de la gente no concibe que las personas discapacitadas pueden disfrutar del sexo o hablar abiertamente sobre su sexualidad como los demás, y esto agrava más aún el problema ya que esto hace que los discapacitados no estén presentes en discurso sobre bienestar sexual”, concluye Matutinovic.